Permitirme hacer una pequeña reflexión al respecto
de estas palabras; que bien utilizadas, y entendiendo como tal también, cuando
se usan en estricto cumplimiento de la ley, no hacen nada mas que expresar el
sentir de lo que es una democracia pura y dura, en la que los números mandan,
para bien o para mal, y que no es preciso detenerse a explicar nada más al
respecto.
El problema empieza, cuando se hace una mala
interpretación del literal de las mismas, llegando incluso a bordear,
presuntamente, la ilegalidad, seguro que a todas/os nos vienen a la memoria
tiempos pretéritos, bueno quizás no tanto, y muchos, o mejor dicho demasiados
ejemplos de ello ¿verdad?
Es frecuente, que para conseguir las mayorías
necesarias, se tengan que juntar un colectivo heterogéneo en algunos casos, y en
otros incluso contra natura, con el fin de conseguir unos objetivos y/o
intereses, cada cual los suyos (que pueden pasar por el poder, no trabajar,
sillones virtuales, medallas, otras veces todos ellos, otras…), seguro que no
es necesario explicar demasiadas cosas que de todas/os son bien conocidas, y
que en muchas ocasiones pasan, por ejemplo, por ningunear y faltar a la
inteligencia y al respeto de las/os compañeras/os de trabajo.
No debería ser preciso recordar, que en el seno de
cualquier organismo colegiado, y el comité de cualquier empresa lo es, las
decisiones se han de tomar efectivamente previo debate, votación, y por mayoría
de todas/os las/os presentes (“…los números mandan…”). Bien, pues sucede que no
son pocas ni casuales, las ocasiones en las que se ¿olvidan? de este precepto,
y por ejemplo, se firman y/o ratifican acuerdos, mucho tiempo antes de
presentarlos ante la representación de todas/os las/os trabajadoras/es.
Ante la convocatoria de una reunión extraordinaria
del comité de empresa, solicitada por dos secciones sindicales (en el caso que
nos ocupa, son la segunda y la tercera fuerzas sindicales en la representación
del comité de empresa), sólo se presentan el presidente y el secretario, además
de las secciones solicitantes. ¿Dónde estaban el resto de miembros del comité?
¿Tal vez no les importen aquellas/os a quienes dicen representar? ¿Quizás sólo
se acuerden cada cuatro años?
A esto es exactamente a lo que me quería referir cuando
se ha hablado de medallas, ninguneo, falta a la inteligencia y falta al respeto.
Y esto es claramente hacer una mala interpretación de “…esto es el juego de las
mayorías…”. No señores, esto tiene otro nombre, y que por respeto a todas/os
las/os lectoras/es de este documento, me vais a permitir que lo omita “……………”, lo
dejo así, y cada cual que ponga el adjetivo que le venga a la cabeza para describir
estas actuaciones.
Bien queridas/os compañeras/os, pues todo esto está sucediendo en el comité
de empresa de Prosegur en Bizkaia. Y estas palabras que ponen título al presente
documento, son las más utilizadas últimamente en el seno de este comité.
Para terminar, me vais a permitir parafrasear a dos
grandes personajes de nuestra historia, de los que alguna/o debiera de tomar
buena nota:
“La verdadera democracia es aquella donde el gobierno hace lo que el
pueblo quiere, y defiende un solo interés: el del pueblo” Juan
Domingo Perón.
“La democracia significaba que todo hombre tenía derecho a ser oído, y
que las decisiones se tomaban conjuntamente, como pueblo” Nelson
Mandela.
Recibir un cordial saludo.
Juan Mª Mantas (Delegado Sindical de ELA-STV en Prosegur Bizkaia)